viernes, 6 de diciembre de 2013

VIDAS"


Cientos de vidas llenas de sentimientos.

Sentimientos que se demuestran
Nunca lo demostramos como deberíamos. Nos conformamos con demostrar poco y realmente no entendemos por qué lo hacemos así, pero lo hacemos. 
Demostrar es bueno, es enriquecer lo que sentimos por alguien a quien valoramos, a quien apreciamos, a quien queremos. 
No tengamos miedo de hacerlo, porque nunca está de más sentirnos queridos, sentirnos amados, sentirnos valorados por alguien nos hace crecer, y en cierto modo nos da vida.

Sentimientos que se guardan
Son raros, son diferentes, algo peculiares, pero que no enseñamos jamás. Probablemente no sea por miedo, ni timidez, quizá en ciertos casos sí. Pero en otros casos es porque lo vemos íntimo, personal, y que no queremos enseñar ni demostrar, ni compartir con nadie.
Sentimientos que se pierden, son muchísimos los que perdemos, pero también ganamos, ganamos mucho más de lo que perdemos. Porque los que perdemos, van en dirección o destinados a los que siempre están, los que se quedan. Eso hace que, en ciertos casos, los sentimientos crezcan, maduren, evolucionen. 
Y sólo es ahí cuando tendemos a demostrar los sentimientos, ya sentidos, pero que no lo hacíamos porque no lo veíamos necesario o no encontrábamos alguna excusa para hacerlo.

Lo cierto es que no hay que buscar motivos para demostrar lo que sientes.

El truco está en no tener excusas para hacerlo, no esperes a tener un motivo porque no tienes que explicar tus sentimientos, tan sólo lo sientes, lo demuestras.

Déjate llevar por tus sentimientos.