miércoles, 24 de octubre de 2012

No hay más!

Pensamos que podemos cuando no se puede, pero aún así no dejamos de intentarlo una y otra ves.
Hasta que te das cuenta que por mucho que te empeñes, y por mucho que quieras seguir intentandolo, hay razones obvias que te dicen que no sigas.           DESPIERTA
Por lo que, ya es hora de abandonar los "pensamientos" que no te dejaban ver lo que realmente era, seguir otro camino y concentrarte en "otras cosas" que puedas lograr.

En el que sea sólo tuyo. Y no concentrarte en "una cosa sola" e intentar conseguir lo que sabes que no puedes. Porque aunque no lo queramos ver, hay cosas que en el fondo son imposibles. (Como por ejemplo, las personas no puedes obligar a que te quieran o hacer sentir cosas que no sienten).

                                                     Ya es hora de seguir hacia donde tu elijas.

Concentrate en ti y no pierdas el tiempo sabiendo que desde el principio sabías que era inalcanzable..

                                             Si no podías antes, que te hace pensar que podrás más adelante?

jueves, 18 de octubre de 2012

Ten empeño"

Cada día de tu vida, vívelo de tal forma que te sientas satisfecho al finalizar el día. Porque nada es más placentero, que llevarte a la cama y buen sabor de boca. 
                  Cada día te sentirás con buena energía al ver que tu vida está dichosa.
Ten empeño, en aquello que quieras alcanzar o en aquello que sientas la necesidad de conseguir. 
Porque nada tiene más mérito que quién no deja de intentarlo y nada es más confortable que tener una meta en la que poder motivarte cada día de tu vida.

Si no sabes lo que quieres, sal a la calle y búscalo, seguro que encontrarás algo en lo que estimularte.


                        Siempre hay algo por lo que vale la pena seguir luchando.

Lo evidente"

Muchas veces, no encerramos en nosotros mismos guardando pensamientos, sentimientos incluso sueños o situaciones que nos gustaría que pasara.
   En cambio, nos conformamos sólo con nuestra imaginación. Porque, en ciertos casos, no tenemos el suficiente coraje como para hacerlos realidad.

                                       O tal vez no tenemos el coraje de aceptar lo evidente.